El Tendedero: Según Emergencias, el balance de destrozos por viento y lluvia de ayer domingo son muchos, demasiados, especialmente en el norte de la isla. Sin embargo debemos decir que en nuestras comarcas de Llevant, Pla, Raiguer y Mijgorn, hemos tenido cierta suerte (excepto los destrozos de la plaza de toros La Macarena de Felanitx y su escenario de las Fiestas de San Agustín, y la pérdida de numerosos árboles en Inca). Salvado estos destrozos de árboles y coches, toldos y ciertos encharcamientos graves, por nuestra zonas han caído de media de 29 a 55 litros por metro cuadrado y se ha limpiado el ambiente, bajando los termómetros a los 18 grados y con tendencia a recuperar los 25. Una temperatura más relajada y humana. Nuestros recursos hídricos habían descendido a casi el 50% y los pozos habían perdido una media de dos metros de profundidad en su subsuelo. Además los árboles autóctonos como el algarrobo, almendro, olivo, padecían el exceso de calor y falta de agua perdiendo el 50% de sus hojas, hasta las higueras comenzaban a sufrir demasiado. Los bomberos de Manacor, Felanitx, Artà, Capdepera, Inca, trabajaron a destajo pero terminaron por ayudar a los de otras localidades porque nuestras comarcas sufrieron la tempestad mucho menos, solamente agua. No hay mal que por bien no venga, siempre hay un menos mal. Dantesco en ciertas zonas del norte, por aquí mejor, los seguros tendrán que asumir muchos desperfectos.

Las cosas positivas de una temporada con casi lleno hasta la bandera sobre todo los meses de mayo, junio, julio, agosto y previsiones para septiembre, es que las Cuevas del Drach y la dels Hams de Porto Cristo, el Museo de la Academia de Rafa Nadal, las Perlas Orquidea y Majórica, los Dinos de Porto Cristo, la oferta complementaria y gastronómica se han recuperado por completo. También los grandes restaurantes de importante aforo y parking de Vilafranca, Petra, Ariany, S'Illot y otros municipios. Las capitales del Llevant y el Raiguer, Manacor e Inca respectivamente, han recuperado el pulso de visitas, así lo evidencias los datos de sus oficinas de turismo e información. Son una media de 4 meses, suficientes como para equilibrar ciertas cajas que padecen muchas dificultades el resto del año. La llegada de famosos y populares por nuestras zonas se ha acentuado, hasta el extremo que es habitual encontrarse con ellos con gran facilidad, si estamos en el lugar adecuado y en el tiempo y hora de sus llegadas. Sin olvidarnos de los ciclistas que cada vez más emplean nuestras rutas y llegan sin problemas al Pla y Llevant, encantados del paisaje y de su oferta. Por supuesto la oferta de los agroturismos, viviendas en rústico, vacacionales, hoteles rurales, fincas turísticas, hacen posible el aumento de ventas en los centros de alimentación, tiendas, oferta complementaria, bares y restaurantes, y todos los que se benefician de su estancia, tiendas de coches de alquiler, gasolineras, complementos, moda, recuerdos.

El Consell de Mallorca tramita la marca “Artesanía de Mallorca”. El objetivo es que los artesanos puedan disfrutar de un sello de calidad que diferencie a quienes trabajan con productos locales y hechos a mano. Se trata de un sello distintivo que pretende diferenciar a los artesanos de la isla: aquellos que venden productos locales y hechos a mano. Hace años que el sector está en decadencia, sufre intrusismo y reivindica combatir la competencia desleal. Es por eso que la institución insular ya trabaja en diferentes iniciativas para que los consumidores puedan reconocer fácilmente el producto artesano de Mallorca. Una de estas iniciativas es la creación de este sello. El proceso de elaboración de la marca ya está en marcha: el Consell de Mallorca ha empezado la tramitación de la imagen corporativa y del reglamento. Cuando se tengan ambas cosas, se iniciará el registro de la marca que se puede demorar entre 12 y 18 meses. Una vez acabado este proceso, los artesanos mallorquines que cumplan con los requisitos que se establecerán al reglamento podrán hacer uso de la marca “Artesanía de Mallorca” para acompañar sus productos y poderlos reconocer mejor. El Consell se ha reunido con el Gremi d'Oficis Artesans para escuchar sus propuestas y necesidades y ha podido evidenciar la importancia de controlar que el producto que se vende a las diferentes ferias y calles es realmente artesano. Ahora mismo, lamenta el sector, en ferias y mercados se puede encontrar una gran oferta de productos que se hacen pasar por artesanos y no lo son. De este modo, con el sello “Artesanía de Mallorca”, no solo se diferenciará a los negocios y productos que siguen este reglamento, sino que también tendrán que pasar las inspecciones pertinentes. El objetivo es que los consumidores tengan la certeza de que el producto que compran es de calidad, hecho a mano y en Mallorca, a la vez que se hace un reconocimiento público del trabajo de calidad hecha por los artesanos.